Vozes enterradas, sementes plantadas: antropofagia e resgate ameríndio em Oswald de Andrade e Eliane Potiguara

Abstract

La figura del indio en la Literatura Brasileña fue marcada por relatos en una perspectiva de no indios. Las voces de los pueblos indígenas fueron silenciadas, ocultadas por el discurso dominante, que diseminaba ideas con base en su punto de vista, muchas veces marcado por teor de superioridad delante de esos pueblos. Principalmente presentes en los textos de viajantes y misionarios de la época da la colonización, los reflejos de esa actitud aun son marcantes en los días actuales: preconceptos e ideas equivocadas acerca de la cultura amerindia. Tiempos después, se pasa del indio bárbaro y salvaje al indio idealizado de obras románticas, manteniendo el discurso parcial pautado en la visión del otro. En 1928, a través de la propuesta antropofágica de Oswald de Andrade, se inicia un nuevo periodo delante de esa realidad, aunque sea una visión desarrollada a partir del hombre blanco. Oswald contribuyó para traer la figura del indio sin la idealización romántica y con base en la valorización de los nativos y de su cultura. El modernista, con su bandera de asimilación crítica de contenidos, proponía un rescate del primitivo como forma de integrar esta realidad a los nuevos tiempos de la industrialización, además de objetivar la ruptura con modelos preestablecidos y eliminación del vector dominante-dominado. En los últimos años, por otro lado, ha crecido el número de obras en el ámbito artístico producidas por los propios pueblos indígenas, trayendo las voces que, en verdad, siempre existirán. En este contexto, se encuentra la obra de Eliane Potiguara. La mujer e indígena, voz marcante del libro Metade cara, metade máscara (2004), presenta al lector lo de vivir entre dos mundos, lo de adaptarte al universo contemporáneo sin perder sus raíces y la sabiduría ancestral. Así como Oswald, Potiguara rescata el primitivo, a través del discurso construido a partir de la mujer-tierra, y asimila recursos del universo del no indio para gritar sus dolores y su esperanza, lo que posibilita un dialogo con la propuesta de la Antropofagia oswaldiana. Se pretende, a partir de la idea desarrollada por Benedito Nunes (1970) acerca del carácter diagnóstico, terapéutico y metafórico de la Antropofagia, establecer relaciones entre los pensamientos de Oswald de Andrade y Eliane Potiguara por medio del arte literaria, reflejando sobre la ruptura con patrones preestablecidos a través de nuevas perspectivas, a ejemplo de la literatura indígena